El Autoshow de Los Angeles contará con 900 modelos, 30 estrenos mundiales y 50 vehículos ecológicos en medio de una era preocupada por el efecto medioambiental
Estamos en una era de cambio, casi de obsesión con el cambio climático. Y se nota y mucho en lugares como un salón del automóvil. Nada más entrar en el de Los Angeles, que está teniendo lugar estos días en el Convention Center de la calle Figueroa, el visitante se topa con el puesto de Edison, la compañía eléctrica, preguntándose si tenemos el garaje preparado para las nuevas generaciones de vehículos eléctricos.
Por fuera, en los exteriores del inmenso pabellón, hay colgada una gran pancarta con el reclamo de General Motors: su nuevo Chevy Volt, el semieléctrico de la marca estadounidense con el que esperan recuperar parte de la hegemonía perdida en los últimos años. Es una de las atracciones del salón.
Y en general, en cada puesto de exhibición de cada gran marca hay algo que nos recuerda que estamos en la era de la conciencia ecológica, en pleno movimiento verde para evitar el calentamiento global de la Tierra. Ese es quizá la nota destacada del Salón del Automóvil de Los Angeles de este año, que abrió sus puertas al público el pasado fin de semana y que permanecerá abierto hasta el próximo día 13.
Además está el brillo de siempre, el esplendor de los coches nuevos, imponente algunos, sueños inalcanzables los otros, y también los comerciales, los posibles para la mayoría de la mortales. Como algunos de los nuevos modelos presentados para captar un mayor segmento de mercado, que hoy en día pasa por los vehículos pequeños y de bajo consumo como el Ford Fiesta —un clásico durante años en Europa—, el Mazda 2 o el Chevy Cruze, los tres debutantes en Norteamérica.
En total serán 30 los estrenos mundiales en el Salón de Los Angeles, que incluyen el nuevo Porsche Boxster Spyder 2011 o la rediseñada minivan Toyota Sienna 2011. También están de estreno la camioneta crossover Hyundai Tucson o el Kia Sorrento, directa competencia de la Sorento.
En cuestiones verdes, no sólo los coches eléctricos están comenzando a dejarse ver. Los híbridos dominan este año la escena angelina con 50 modelos distintos, donde destaca el Prius de Toyota con su techo solar para conservar energía, o el nuevo Mercedes Benz S400. Pero también hay una buena cantidad de vehículos propulsados por motores de etanol, hidrógeno y diesel, un tipo de combustible muy habitual en Europa. De hecho, destacan los de Volkswagen y los de Audi, las prestigiosas marcas alemanas. El Gof TDI y el Audi 3 TDI son cada vez más populares en Estados Unidos además de mucho más ecológicos.
Y luego están los conceptos, que atraen una gran cantidad de público a los salones. Como el increíble y futurista BMW Vision o el Honda Neo-personal o el Mini Roadster, por nombrar algunos.
Espectáculo hay para todos los gustos, además de unos cuantos juegos, concursos y otros asuntos de interés para pasar el día entre autos nuevos, sueños.
