Usted ha dedicado toda una vida de esfuerzo, tiempo y capital en la construcción de su negocio. Cuando llega el momento de pensar en la jubilación, su estrategia es vender su empresa por un buen precio, asentarse y disfrutar de una jubilación financieramente segura. Pero, al igual que muchos propietarios de negocios, no se ha molestado en hacer otros planes de jubilación.
Tienes que ser realista
¿Cuáles son las probabilidades de que una persona se aparezca en el momento adecuado con dinero en efectivo en la mano para comprar la compañía por un precio justo? Miles miles de propietarios de pequeñas empresas saben que esto no sucede. Tal vez el negocio es demasiado especializado o está demasiado atada a la personalidad y las habilidades únicas de su propietario. O tal vez los posibles compradores solo hacen ofertas muy por debajo del precio que pide. Cualquiera sea la razón, muchos propietarios encuentran que su empresa se ha convertido de repente en un elefante blanco que nadie quiere.
Seleccione y desarrolle un sucesor
Por eso es muy importante preparar un reemplazo, alguien que va a comprar su empresa cuando esté listo para retirarse. Tal vez sea un copropietario actual (pero tenga cuidado si él o ella tiene aproximadamente la misma edad que usted y que piense jubilarse casi al mismo tiempo).
Los dueños de negocios que preparan con éxito a sus propios reemplazos no dejan nada al azar. Se dan cuenta de que no hay margen de error cuando la jubilación está cerca.
Aquí hay algunos pasos que debe seguir:
• Sea cauteloso. Asegúrese de que su heredero aparente es la persona adecuada en términos de temperamento, personalidad, competencias y objetivos personales.
• Establezca un período de prueba para que pueda terminar la relación si usted encuentra que esta persona no va a funcionar. Durante ese período, mantenga todo de manera informal, solo estrictamente verbal. Incluso cuando va a hacer un acuerdo formal, asegúrese de que contenga una disposición de terminación.
• Cree un acuerdo de compra-venta. Con la ayuda de su abogado, establezca lo que cada quien hace y lo que obtiene, explicando todos los detalles y advertencias, incluyendo la forma de establecer la valoración final de la empresa. Este acuerdo formal protege a todo el mundo.
• Construya un mecanismo de financiación. Esto es crucial. No importa lo buenos que sean los términos en el acuerdo de compra/venta, será inútil si el dinero no está allí cuando sea necesario para llevar a cabo el plan. Bajo una opción, el sucesor puede ser capaz de comprar la empresa de beneficios en curso. Otras opciones incluyen la creación de un fondo de amortización o permitir que el sucesor simplemente pedir prestado el dinero. Estas opciones pueden funcionar pero que dejan mucho a la suerte. En su lugar, considere un vehículo de financiamiento que protege a su familia en caso de incapacidad o muerte prematura, como el seguro de vida y de ingresos por incapacidad.
• Tenga un plan B. Como propietario de un negocio, usted sabe que muy pocas cosas salen como se planean. ¿Y si su negocio golpea tiempos difíciles o su sucesor muere, queda incapacitado, o se va a causa de un conflicto de personalidad? ¿O si simplemente no hay heredero a la espera? A veces, la mejor manera es simplemente desmantelar el negocio.
Si usted tiene o no un posible sucesor para su empresa, debe comenzar trazar su estrategia de jubilación hoy.
Con información de New York Life
