La variedad en los negocios por lo general es buena, pero cuando se trata de ganancias e ingresos, las expectativas de un empresario deben estar enfocadas en una sola cosa: pensar en grande, así lo dice el experto en desarrollo de negocios Cameron Herold, quien impulsó el crecimiento de la empresa 1-800-GOT-JUNK de 2 a 106 millones de dólares en pocos años.
«Si usted es un director ejecutivo o un empresario y no planea duplicar sus ganancias e ingresos en los próximos tres años, puede ser que no tenga enfoque», dice Herold, autor del libro «Double Double».
«Está a su alcance el poder aumentar su negocio drásticamente en unos pocos años, pero hay que hacer varios objetivos más pequeños para lograrlo. Todo comienza con una visión viva», comentó el especialista, quien le explica cómo cultivar esa visión.
1. Salga de su oficina. Una visión necesita perspectiva, y si usted está a la espera de la inspiración sentado en su escritorio, se verá arrastrado por la rutina diaria. Es necesario permitir que su mente viaje hacia el futuro, pero en la oficina se encontrará con limitaciones específicas. Vaya a un sitio donde se olvide de las tareas y obligaciones diarias. Un buen lugar puede ser en una playa tranquila, un bosque o un lugar en las montañas. O, simplemente tumbarse en una hamaca en el jardín de su casa y empezar a esbozar ideas.
2. Apague la computadora. Las computadoras lo envuelven en un remolino de correos electrónicos y tareas diarias. En su lugar, use pluma y papel. Se produce magia en tan sólo escribir a mano las ideas y proyectos.
3. Piense «dónde» y no «cómo». Vea el camino delante de usted. No se enfoque en cómo va a hacer que sucedan las cosas. La mentalidad del “cómo” es algo así como tratar de editar algo antes que se escriba. Por otro lado, la mentalidad del “dónde” le permite simplemente obtener ideas. ¿Dónde quiere que su empresa vaya? Visualice el camino y permita que esa visión se fije en su mente.
4. Piense fuera de lo convencional. El salir de su zona de confort cambiará sus patrones de pensamiento habituales y despertará la creatividad. Piense en cosas locas, tal vez algo demasiado extravagante para compartir en una reunión.
«Me gusta usar una técnica llamada ‘mapas mentales’, que no es como la escritura formal, sino algo así como dejar caer pensamientos sobre el papel y darles contenido a salir adelante», dice el experto. He aquí una buena regla: si lo que piensa durante una de estas sesiones le parece extraño o poco probable, es algo que sin duda debe incluir en su visión.
Con información de News and Experts
