Persona comprando un auto nuevo

Algunos de los principales concesionarios estadounidenses lanzaron un programa privado de estímulo para ofrecer hasta 4,500 dólares en incentivos para consumidores que se quedaron fuera del plan de estímulo financiado por el Gobierno.

 

Debido a las reglas del programa gubernamental, más de 90 por ciento de los consumidores no cumplen con los requisitos y se muestran descontentos. En consecuencia, algunos de los concesionarios más importantes del país lanzaron recientemente el AutoStimulusPlan.com, un plan de auto estímulo que es incluyente y da cabida a vehículos previos a 2007 sin importar su millaje.

Este plan, financiado por los concesionarios, compensa además las brechas que no permiten a los consumidores adquirir vehículos de segunda mano o elegir un arrendamiento más corto. Mucha gente no puede darse el lujo de comprar un vehículo nuevo, pero el programa gubernamental no opera con vehículos usados. Por ello, en los últimos meses el volumen de autos usados disminuyó aproximadamente un 20 por ciento, según lo señala CashForClunkersInformation.org.

Las reglas del Gobierno han afectado las ventas de autos usados y los inventarios de los concesionarios al absorber la mayoría de los vehículos nuevos que cumplen los requisitos al tiempo que dejan un excedente de vehículos que no califican. “Este nuevo estímulo llega justo a tiempo, ya que muchos concesionarios se han agotado de autos que cumplen los requisitos”, afirmó Brian Benstock de Paragon Auto Group, una de las agencias participantes en la ciudad de Nueva York. “Hay que destruir las carcachas, por lo que estamos ofreciendo menos autos de segunda mano”, informó Benstock. “Esto nos ha obligado a comprar más autos usados en subastas a precios más altos. Preferiríamos dar a los consumidores 20 por ciento por sus autos en permuta que pagar más en las subastas”.

 

 

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