El crecimiento está en el futuro para las empresas medianas de Estados Unidos, así lo sugiere una nueva investigación; y los expertos dicen que esto indica cosas positivas para quienes buscan empleo y para la economía en general.
Una encuesta reciente descubrió que los dueños de empresas medianas son más optimistas sobre la salud de sus negocios y más optimistas sobre sus perspectivas de crecimiento futuro que en cualquier momento en los últimos tres años. La encuesta fue realizada por The Harris Poll en nombre de CIT Group Inc., un proveedor de financiamiento para empresas medianas.
«Las empresas del mercado intermedio son contribuyentes importantes para una economía saludable», dice Jim Hudak, presidente de la división de finanzas comerciales de CIT. «Nos alientan los resultados de la encuesta que muestran que una gran mayoría de su liderazgo espera que sus empresas crezcan e inviertan en el próximo año».
La mayoría de los ejecutivos de las empresas del mercado intermedio encuestadas dicen que la salud de su empresa es sólida (84 por ciento), que su empresa está mejor hoy que hace un año (70 por ciento) y que su empresa ha experimentado un aumento en las ventas (77 por ciento ), demanda de productos (76 por ciento) y clientes (73 por ciento) durante el año pasado.
Como grupo, estos ejecutivos están satisfechos con el estado actual de la economía, y sus percepciones en los tres frentes económicos, local, nacional y global, se han vuelto cada vez más positivos desde 2015.
Los ejecutivos de mercados intermedios también prevén un futuro mejor, con una gran mayoría que espera un crecimiento en los próximos 12 meses, diversificación de productos, crecimiento del alcance de sus productos, y servicios y expansión a otros mercados. Además, el 81 por ciento espera contratar empleados adicionales durante los próximos 12 meses, y el 93 por ciento planea invertir en su negocio en el 2018.
En cuanto a las preocupaciones que tienen los líderes de las empresas medianas, estas incluyen cuestiones tales como la seguridad de datos, la inflación y los desafíos de contratar y retener empleados talentosos. La persistente incertidumbre económica también sigue siendo un problema, aunque menos que en 2016.
Con información de StatePoint
