William S. Wooditch
Usted trabaja para sí mismo. Entre más habilidades y talentos que adquiera, perfeccione y refine, mayor será el valor que se esté creando. Es como convertirse en su propia franquicia.
Incluso si trabaja para otra persona o empresa, usted es el director general de su franquicia personal. Su franquicia puede fortalecerse o debilitarse. Está en usted el poder de crear valor y mover su plataforma de personal y de negocios hacia adelante.
Su franquicia se apoya en cuatro pilares: mente, cuerpo, espíritu y campo emocional. Estas esferas de energía apoyan la plataforma que determina el valor, la salud, el crecimiento y la estabilidad de su franquicia.
Para que su franquicia tenga éxito, debe adoptar este modo de pensar: «si ha de ser, depende de mí». Encuentre la manera o haga usted mismo el camino. Aquellos que determinan crear lo mejor en sus carreras y vidas saben el precio del éxito y están dispuestos a pagar el costo todos los días. Cuando otros encuentran que lo que ofrece es valioso, empezará a construir una franquicia a prueba de recesión.
Su franquicia le exige la voluntad de aprender las bases de lo que quiere comercializar y dominar las habilidades y fundamentos que separan a los que tratan de sobrevivir de los que prosperan. Su franquicia le exige que usted haga el trabajo. La calidad de su trabajo se convertirá en su sello. Sea resistente, adaptable, esté dispuesto a correr riesgos de forma inteligente y hacer esas cosas que marcan la diferencia para las personas.
Los empleadores no pueden garantizar empleo de por vida. Su disposición y la capacidad para aprender y aplicar la lección para tener efectos positivos, le ayudará a crecer personal y profesionalmente. Manténgase alerta y con una dedicación constante por mejorar. Si el resultado coincide con su esfuerzo, alguien, en algún lugar, lo encontrará valioso para ofrecerle empleo.
O, si siente el llamado por convertirse en empresario, puede trabajar para sí mismo. Puede permanecer en la preferencia de otros en el mercado. Opte por convertirse en un regalo indispensable.
Dese cuenta de que su trabajo es su retrato personal. Se crea a partir de un lienzo que se va llenando con cada correo electrónico que escribe, cada letra que teclea, cada conversación que tiene, cada pensamiento que cruza por su mente y cada acción que emana de ese pensamiento. Su trabajo lo pinta y lo enmarca no sólo como una marca, sino como una empresa singular.
William S. Wooditch es autor de “Always Forward! Discover the 7 Secrets of Sales Success” (www.BillWooditch.com).
Con información de News and Experts
