Consejos financieros para un: año nuevo, vida nueva. Y de nuevo la resolución de ser más eficiente en cuenstiones económicas
Se acaba un año para olvidar en lo financiero, pero se prevé que el siguiente traiga mejores números y mayores oportunidades para soñar con hacer cosas grandes. ¿Y por qué no? Basta con organizarse un poco mejor, ser un tanto más metódico y estar dispuesto a hacer algunos ajustes al presupuesto.
Consejos Financieros
Desde aquí les proponemos algo tan sencillo como llevar los gastos en un documento, donde figure cada centavo de lo que se gasta en el año. Si es metódico y anota —en papel o en su computadora, preferiblemente— cada movimiento financiero, pronto tendrá una idea exacta de su presupuesto mensual y de cuánto dinero necesita para cubrir esos gastos mes a mes.
Además de los gastos, que van desde los almuerzos en el trabajo, hasta el supermercado pasando por ropa, médico e incluso un día en Disneylandia, es importante apuntar todo lo que se ingresa, ya sea su sueldo, como un trabajo extra, la devolución de impuestos o los intereses de una cuenta de banco. Si el balance es positivo, eso significa que los ahorros están empezando a crecer, algo que en muchos casos puede ser un incentivo para seguir por el buen camino.
En caso de que estemos entrando en números rojos, puede ser un toque de atención para corregir algunos capítulos o recortar de donde más se pueda. También está la opción de trabajar más para redondear el presupuesto.
Ese documento debe ser un termómetro preciso del estado de sus finanzas en casa, y una especie de policía que le alerte de movimientos innecesarios como el gasto en sacar dinero de cajeros automáticos que no sean de su banco y le cobren comisión, o aquellos días en los que se le va la mano invitando a cenar a sus amigos.
Aunque algunos puedan estar pensando que ese ejercicio requiere disciplina y la constancia de no abandonarlo para que sea posible anotar todas las cuentas con precisión, a largo plazo es un reflejo de los logros familiares para ahorrar y una forma de medir las metas que se pretenden alcanzar. Y cuando acabe el año, será el momento de determinar si realmente le fue o no como esperaba.
