La escasez de viviendas está disparando los precios en todo el sur del estado
El mercado de bienes raíces en el sur de California es uno de los más apretados que se recuerdan. No hay suficientes casas para abastecer una demanda creciente sustentada en el popular dicho, cada vez más, de que todo el mundo quiere vivir en el estado dorado, y eso ha hecho subir de nuevo los precios de la vivienda.
En total, ya son 49 meses consecutivos de incremento en el precio medio de una casa, ubicado, de acuerdo al dato de febrero de 2016, en 430,000 dólares, no muy lejos de los 495,000 que costaba vivir en el sur de California antes de la gran crisis financiera de 2008.
Todo ello al comienzo de la que suele ser la época más fértil para los agentes de bienes raíces, la primavera, por lo que se espera que el panorama sea de férrea lucha entre múltiples compradores por hacerse con la misma casa, lo que puede contribuir a que suba aún más el valor de las fincas.
«Estén listos para hacer la oferta desde el coche del agente de bienes raíces» , decía con un punto de exageración Jeff Lazerson, un experto del mercado consultado por el diario Los Angeles Times. Lazerson confirma que sus clientes tienen que poner una media de cinco ofertas para hacerse con una casa, con la demanda ‘in crescendo’ para los primeros compradores y para aquellos que están buscando mudarse a una vivienda más grande.
El otro efecto que se está produciendo es la presencia masiva de compradores en cada ‘Open House’ para mostrar las viviendas en venta, y la reducción, al mismo tiempo, de la cantidad de días que cada casa está en el mercado disponible hasta que se cierra la operación.
La situación está poniendo además la presión sobre muchos dueños de casa ante la opción de vender y recuperar liquidez en un momento óptimo para hacerlo.
