A pesar de que a principios del 2017 fueron detenidas varias toneladas de aguacates procedentes de México con destino a los Estados Unidos, al final no hubo desabasto para que los amantes del guacamole pudieran celebrar el Súper Tazón, evento para el que, según datos, se consumieron unas 35 mil toneladas de aguacate.
El año pasado terminó con números positivos para la industria del aguacate mexicano, tanto que se colocó como el producto de exportación que más ganancias netas generó para el vecino país, con más de 2,220 millones de dólares, superando en este rubro al petróleo y sus derivados, esto de acuerdo a la Secretaría de Economía del vecino país.
El estado de Michoacán es el principal productor del llamado “oro verde”, una industria que no solamente ha conquistado al mercado americano, sino que también ha visto crecer la demanda en Europa y en Asia. Pero mientras se resuelve una posible renegociación del Tratado de Libre Comercio entre México y Estados Unidos, el producto espera superar las 860 mil toneladas exportadas a este país en el 2016.
Cabe señalar que una gran mayoría de los aguacates exportados de México van para el mercado estadounidense, con un 77 por ciento, aunque la demanda del fruto ha crecido en países como Japón, Alemania, Holanda y China. El resto de Europa también está en la mira.
Los productores mexicanos parecen confiados en que, debido a la gran demanda en Estados Unidos por el aguacate, seguirán exportando como siempre, o mejor; pero por si las dudas, ya se encuentran explorando otros mercados y analizando los medios que hacen falta para que el producto llegue fresco y a tiempo a lugares más lejanos.
