Raúl Grijalva, congresista por Arizona, expresó en conferencia de prensa su intención de hacer de Yuma un lugar con mayor calidad de vida. Para ello, pondrá en marcha dos medidas significativas: mayores beneficios a los desempleados y un salario mínimo que alcanzaría los 10,10 dólares por hora.
El principal motivo que empuja a Grijalva a otorgar mayores ventajas a los desempleados es que, como declaraba en la conferencia desde su oficina en Somerton, los beneficios federales se acabaron el pasado 28 de Diciembre, dejando a muchas personas que perdieron su trabajo en las últimas fechas expuestas a situaciones precarias.
Pero Grijalva quiere la extensión de estos beneficios. “Hay un número significativo de gente en en condado de Yuma que han visto desaparecer su cobro por desempleo”, dijo, añadiendo que “se trata de gente que generalmente está buscando trabajo desesperadamente. Quieren trabajar y nosotros deberíamos ayudarles, al menos, por tres meses. Aunque yo preferiría un año”.
Obviamente se necesitan recursos para medidas como el aumento del salario mínimo, medidas que precisamente, no van a caer del cielo. El congresista hablaba de la gran oportunidad que estaba dejando pasar el condado en campos como transporte, manufactura y comercio.
“El condado de Yuma goza de una localización envidiable. El hecho de ser frontera con California le ofrece la oportunidad de ser un eje de referencia en transporte o manufactura”, aseguró Grijalva.
Todas estos buenos propósitos parecen aliviar las críticas hacia el congresista después de la escasez de votos recibidos en su última aparición en el congreso aunque Grijalva restó importancia a los hechos y afirmó, en lo que parece un discurso populista más que algo realmente sentido, que “antes de pasar un día votando, prefiero estar un día más trabajando con mis constituyentes”
Y es que es cierto que todos estos buenos propósitos no son espontáneos, si no que ya el pasado mes de diciembre Raúl Grijalva saltó a primera plana por su carta al presidente Obama, recordándole su promesa de subir el salario mínimo en todo el país de forma unilateral.