Los dueños de negocio o los que dirigen un equipo de trabajo pueden obtener el máximo rendimiento de su personal, al hacer cambios simples pero estratégicos
Uno de los mayores desafíos que enfrentan los líderes corporativos es saber equilibrar lo que es bueno para el equipo con lo que funciona mejor para los empleados de forma individual.
Después de todo, no todo el mundo piensa de la misma manera. Sus motivaciones difieren, al igual que sus procesos de trabajo. Algunos son colaboradores, otros trabajan mejor solos. Algunos trabajan mejor a largo plazo y otros cuando tienen una fecha límite que se acerca rápidamente. A algunos les gusta trabajar en un ambiente bullicioso, mientras que otros prefieren aislarse del ruido.
Los que son líderes en una empresa pueden lograr que todas esas diversas personalidades encuentren la «versión de mayor rendimiento» de sí mismos, dice el Dr. Greg Wells, autor de «The Ripple Effect: Eat, Sleep, Move and Think Better”.
Wells sugiere estas tres medidas para conseguirlo:
1. Fomente las pausas. No se trata de salir rápido para fumar un cigarrillo. Todo lo contrario. Wells dice que las pausas pueden tener una inclinación sana. «Asegúrese de tomar algún tiempo para romper el ciclo de estrés y permitir que la gente descanse, se recupere y se regenere», dice. Por ejemplo, caminar es una actividad especialmente poderosa, ya que se ha demostrado que mejora la creatividad. El ejercicio al aire libre, como ir a dar un paseo por el parque, se ha demostrado que sirve para mejorar la resolución de problemas. Hay lugares que tienen jardines donde los empleados pueden salir un momento para relajarse.
2. Elimine las distracciones. Estar enfocado es clave para el éxito en cualquier disciplina, ya sea en la música, los deportes o el trabajo. «Sin embargo, vivimos en la era de la distracción», dice Wells. Los correos electrónicos, las redes sociales y los mensajes de texto compiten por nuestra atención, sin mencionar el trabajo que se supone que estamos haciendo. «Los atletas que son capaces de mantenerse enfocados en la tarea que están realizando, a pesar de la presión y las distracciones, alcanzan más fácilmente su potencial», dice el experto. «Aquellos que no ignoran las distracciones cometen errores o no cumplen con las expectativas». Su equipo de trabajo puede comenzar apagando los “ruidos electrónicos” durante una hora a la vez. O intente que se enfoquen en «una sola tarea»: Pídales que elijan su tarea más importante para trabajar primero y para realizarla tan exclusivamente como sea posible.
3. Concéntrese en las «micro-mejoras». Wells aconseja centrarse en el «1 por ciento de ganancia». «Lo que distingue a los atletas de élite del resto es su compromiso de ser un poco mejor cada día», dice. «Un cambio del 1 por ciento podría no parecer mucho, pero pequeñas mejoras en la forma de vivir cada día amplificarán su vida». Uno por ciento de su día son 15 minutos, y 15 minutos de ejercicio pueden reducir su riesgo de cáncer de mama o de colon de un 24 a un 40 por ciento. Si se van sumando con el tiempo, los cambios a pequeña escala pueden tener un efecto poderoso en su salud y en su rendimiento.
«Cada empleado se beneficiará a su manera», dice Wells. «Pero el resultado final será un grupo más comprometido y más productivo».
Con información de News and Experts