Los problemas económicas son la causa principal de divorcio. Si se pueden evitar antes de casarse, es posible que se dé la armonía eterna.
A continuación, algunos asuntos para poner sobre la mesa:
Deudas pendientes. Saque cuentas de todas las deudas pendientes y obligaciones financieras, incluyendo préstamos estudiantiles, saldos de tarjeta de crédito, pagos del automóvil, alquiler de apartamento, etc. Sea sincero con respecto a desaciertos crediticios pasados, como ser pagos atrasados u omitidos, ejecuciones hipotecarias y cualquier otro asunto que podría perjudicar su capacidad de calificar para un nuevo crédito como pareja.
Tenga en cuenta que, si bien las deudas contraídas antes del matrimonio continúan siendo su responsabilidad y no deberían afectar la calificación de crédito de su cónyuge, serán conjuntamente responsables de cualquier cuenta y deuda futura que adquieran juntos.
Informes de crédito. Debido a que los prestamistas a menudo toman decisiones de crédito y de tasas de préstamo basadas en la calificación de crédito más baja de cualquiera de los cónyuges, compartan mutuamente sus informes de crédito para que no haya sorpresas. Pueden solicitar individualmente un informe de crédito gratuito por año a cualquiera de las tres agencias de crédito principales en www.annualcreditreport.com.
También puede solicitar un informe de crédito para establecer un punto de partida con respecto a su posición crediticia. Puede solicitar su calificación de crédito de FICO en www.myfico.com. Si uno de ustedes o ambos poseen un puntaje bajo (por ejemplo, menos de 700), seguramente querrán aumentarlo antes de solicitar un préstamo hipotecario o para comprar un automóvil. Las menores tasas de interés resultantes podrían ahorrarles miles de dólares durante la vigencia del préstamo.
Para consejos acerca de cómo reparar – o proteger su calificación de crédito, visite What’s My Score, un programa de educación financiera de Visa Inc. (www.whatsmyscore.org.) El sitio también ofrece FICO Score Estimator (una calculadora de crédito de FICO) que le ayudará a calcular su calificación aproximada, como también una explicación más detallada sobre las diferencias entre los informes de crédito y la calificación de crédito.
Alineen sus metas. Nadie espera que los cónyuges tengan una misma opinión en todo, pero podrían tener problemas su no llegan a un acuerdo o no están dispuestos a limar diferencias en asuntos de importancia tales como la titularidad de la vivienda, continuar con los estudios, formar una familia y determinar cuándo tienen previsto jubilarse. La consejería prematrimonial es siempre una buena idea y los asuntos financieros deberían formar parte del paquete.
Compartan las obligaciones financieras. Muchas parejas optan por que una persona se ocupe de administrar todas las finanzas, desde la contabilidad hasta la chequera, incluso la elección de inversiones para la jubilación. Probablemente sea más atinado que ambos participen activamente en todas las decisiones financieras importantes.
El sitio de administración financiera personal gratuito de Visa, Practical Money Skills for Life, ofrece una guía práctica para las finanzas matrimoniales, la cual trata asuntos como los acuerdos prenupciales, transacciones bancarias, seguros, preparación de presupuestos, impuestos, planificación patrimonial y establecimiento de metas financieras a largo plazo(www.practicalmoneyskills.com/marriage.)
Comiencen su matrimonio con el pie derecho manteniendo un diálogo abierto y honesto acerca de las finanzas.