Para llegar a ser un empresario exitoso no solo se trata de una buena idea o contar con el capital, hace falta conquistar la convicción y la curiosidad.
Cuando se habla de negocios lo único que pasa por la mente de un emprendedor es una sola palabra: éxito. Pero para alcanzar el éxito no solo falta tenerlo como objetivo, sino que también poner el 100 por ciento de nuestra capacidad y dominar dos características muy específicas: convicción y curiosidad.
Convicción
Para convertirse en empresarios exitosos es indispensable perseverar en nuestro objetivo, creer en este y jamás quitar el dedo del renglón. En una entrevista reciente con Tony Hawk, le preguntaron sobre qué era necesario para ser un gran patinador. Tony respondió que la única diferencia entre ser bueno y ser el mejor es creer que lo serás. El mejor patinador es aquel que se vuelve a poner de pie después de cada caída.
Sucede lo mismo con los empresarios exitosos; equivocarse y fallar nunca los detiene. No existe duda alguna de que van a prosperar y tener éxito. Algunos lo llaman espejismo o ilusión, los empresarios lo llaman convicción.
Curiosidad
Mantener la curiosidad es una de las metodologías que alimentan su conocimiento y alimentar su conocimiento significa sabiduría. Los empresarios exitosos están haciendo preguntas todo el tiempo, aprendiendo de los demás, nunca están satisfechos con lo que ya saben y creen que el conocimiento es poder.
La curiosidad es lo que los impulsa a arriesgarse y hacer cosas nuevas. La mezcla de estas dos características permite que los empresarios tomen decisiones sin temor alguno, viendo siempre hacia el frente y arriesgándose a intentar cosas nuevas sin miedo al fracaso.
Ponga estas dos características en práctica hoy mismo y notará una gran diferencia a la hora de alcanzar el éxito en su negocio.
