Lea los consejos de un inmigrante que gracias a las pasantías se convirtió en propietario y CEO de una empresa miltimillonaria

Fatih Ozmen fue de pasante a propietario y CEO del líder aeroespacial y de seguridad nacional, Sierra Nevada Corporation (SNC).

Comenzando en SNC como pasante hace casi 40 años cuando era una empresa de ingeniería pequeña y en dificultades, Ozmen y su esposa, Eren (ahora presidenta de la compañía), tuvieron la oportunidad de adquirir la compañía unos años más tarde. Hoy, SNC es un disruptor ágil y de vanguardia en los contratos gubernamentales con una fuerza laboral de 4,000 personas. Ozmen ha sido CEO y propietario de SNC durante 25 años.

Sobre su viaje de pasante a CEO y propietario, Ozmen dijo: «Le doy crédito a la gran suerte que tuve y a haber hecho algunas buenas elecciones, comenzando por cómo desarrollé mi pasantía». 

Estos son sus tres consejos para ayudarlo a aprovechar al máximo su etapa como pasante:

1. Busque empresas con misiones y valores que lo inspiren. «Como estudiante o pasante, puede sentirse independiente, como si tuviera el futuro en sus manos. Muchos empresarios le dirán que considere una pasantía como una transacción para satisfacer sus necesidades. Lo animo a que le dé un enfoque hacia fuera”, dijo Ozmen.

“Animaría a los jóvenes a identificar las empresas o equipos que están abordando desafíos que realmente le interesan. Lea las biografías de las personas con las que trabajaría”, agregó. 

2. Busque siempre una oportunidad para comprender la necesidad central, mirar más allá del «qué» y comprender verdaderamente el «por qué». «Como joven ingeniero, trabajar para mejorar los sistemas de aterrizaje de los aviones para que funcionen en todas las condiciones, incluida la lluvia, fue el mayor privilegio para mí”, señaló Ozmen. 

«Fue invaluable ver de primera mano los problemas a los que se enfrentaban los pilotos y los entornos en los que los marineros tenían que trabajar”. 

«Nuestra tarea de ingeniería fue sencilla: solucionar un defecto extraño en el sistema de aterrizaje existente que no funcionó como se esperaba cuando llovió. Lo hicimos funcionar y es sorprendente que 30 años después la Marina todavía use la tecnología que creamos. Es importante destacar que yo pude presenciar el desafío y la solución, trabajar junto a los marineros y verlo desde la perspectiva de los pilotos. Esto me ayudó a ir más allá del qué de nuestra misión, una falla en la tecnología, para comprender realmente el por qué, para salvar vidas».

3. Abrace la novedad y el cambio como un viaje, no como un obstáculo. «Cuando Eren y yo vinimos por primera vez a los EEUU, éramos jóvenes, no hablamos mucho inglés y no teníamos dinero. Pero teníamos objetivos y una pasión implacable para perseguir nuestros sueños. ¿Fue fácil? No. Y yo mentiría si dijera que no hubo días en que parecía imposible o los desafíos que enfrentamos en el camino parecían insuperables. Pero este es nuestro sueño americano. Nada de esto hubiera sido posible si no hubiéramos mirado más allá de la incertidumbre y desafíos. Es un gran país que lo hizo posible. No podría hacerlo en ningún otro lugar del mundo.

«Vivimos en un mundo donde el sueño americano está al alcance de todos», expresó. 

Con el poder de los sueños, la innovación y la inspiración, no hay límite para lo que puede lograr una vez que comience, dice Ozmen.

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