Hay muchas personas que se encuentran trabajando en un área que ya no capta su interés o que no les despierta ninguna pasión. La mayoría sueña con empezar su propio negocio basado en lo que de verdad les apasiona.
Pero convertir un pasatiempo en un negocio puede parecer muy difícil. Roberto Torres, el co-fundador de la empresa Black & Denim Apparel Company, fue un auditor por ocho años antes de decidir cambiar de rumbo y convertirse en empresario.
Ahora encabeza una empresa en crecimiento, fue nombrado uno de los ganadores de la competencia MillerCoors Urban Entrepreneurship Series, y convirtió exitosamente su pasión en un nuevo negocio.
El ahora empresario ofrece cinco consejos sencillos que debe recordar al comenzar su propio negocio:
Haga compromisos, en vez de promesas. No se puede iniciar un negocio y dejarlo a mitad de camino. Una vez que esté plenamente comprometido, necesita cumplir. No va a ser fácil, pero el estar comprometido le asegurará el éxito empresarial. Si está pensando en cambiar de rumbo, debe estar absolutamente seguro antes de hacerlo. De lo contrario, podría costarle el sueño, el dinero y más importante aún, el tiempo.
Tenga un plan, en vez de una excusa. Asegúrese de tener un plan para todo y que cada tarea quede descrita en detalle. No tener un plan puede hacerle perder mucho tiempo y aun peor, hacer que otras personas también pierdan su tiempo. Recuerde que ¡el tiempo es dinero!
Diga, «busquemos la respuesta» en lugar de, «nadie sabe”. Si su plan no va como esperaba, no le de la espalda al proyecto, en lugar de ver qué fue lo que salió mal. Busque información en un libro o en internet, o encuentre a alguien que pueda explicárselo mejor.
Diríjase al problema, en lugar de atorarse en él. Cuando usted es un empresario, es el conjunto de la empresa. No puede depender de nadie para que solucione sus problemas. Cada vez que tropiece con un problema, dedíquese a encontrar una solución.
Aprenda de sus errores, en vez de evitarlos. Si su plan no funcionó la primera vez, averigüe qué fue lo que falló y vuelva a diseñar un nuevo plan. No se desanime. Aprenda de sus errores y ajuste sus próximos pasos, según sea necesario.
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