Muchos pensaban que ya había tocado fondo, pero los precios de las viviendas unifamiliares de las veinte mayores ciudades de Estados Unidos se abarataron en abril un 18,1 por ciento con respecto al mismo mes del año anterior, lo que es una buena noticia por ser una ralentización en la desaceleración de los precios.
Según esos datos, aunque la caída anual de los precios sigue superando el 18 por ciento en las veinte mayores ciudades del país, se observa una moderación en el ritmo de depreciación de las viviendas, ya que en marzo el descenso anual fue del 18,7 por ciento.
Sólo entre marzo y abril el precio de las viviendas unifamiliares medio en las grandes ciudades descendió el 0,6 por ciento, frente al 1,8 por ciento que preveían los analistas y que hubiera dejado el descenso anual en el 18,6 por ciento. Entre febrero y marzo el recorte mensual de precios fue del 2,2 por ciento.