El gigante de Cupertino anunció mejores ingresos de lo esperado frente a una caída de sus beneficios y un 15% menos de ventas de sus iPhone
Wall Street esperaba como agua de mayo una señal positiva por parte de Apple y la obtuvo a medias. El gigante de Cupertino anunció resultados en línea con lo esperado por los analistas de cara a los últimos tres meses de 2018 —primer trimestre fiscal de 2019—, con unos ingresos de 84.310 millones de dólares y unas reservas de capital de 245.000 millones de dólares, un 3% más que hace tres meses.
Sin embargo, sus ganancias durante los meses de octubre, noviembre y diciembre cayeron un 0,5% con respecto al mismo periodo del año anterior, alcanzando los 19.965 millones de dólares, golpeados por el peor desempeño de su producto estrella, el iPhone, y la bajada en las ventas en China. La facturación en el gigante asiático alcanzó los 13.000 millones de dólares, un 27% menos que hace un año.
En cuanto a sus populares teléfonos inteligentes, el descenso fue del 15% con respecto al mismo trimestre del año pasado, lo que se tradujo en el primer descenso en ingresos durante la temporada festiva desde 2001. El beneficio neto por acción alcanzó los 4,18 dólares por título frente a los 3,89 del primer trimestre de 2018, ayudando a que sus títulos se revalorizaran tras el cierre del mercado hasta un 4%.
Todo ello en línea con lo anunciado por el máximo responsable de la empresa, Tim Cook, a principios de año. El 3 de enero comunicó a sus inversores a través de una carta que facturarían entre 5.000 y 8.000 millones de dólares menos de lo previsto en el primer trimestre de su nuevo ejercicio fiscal. Le echó la culpa en gran parte a China y a la etapa de desaceleración económica que atraviesa su segunda fuente de ingresos tras Estados Unidos.
“Aunque anticipábamos algunos retos en mercados emergentes clave, no fuimos capaces de ver la magnitud de la desaceleración económica, particularmente en China. La mayoría de nuestra rebaja en cuanto a ingresos previstos ha ocurrido en China con respecto al iPhone, Mac e iPad”, indicó Cook.
Además, en noviembre anunciaron que dejarían de publicar el dato de las ventas trimestrales de iPhone en todo el mundo, un cambio de política que contribuyó a su caída en picado a finales de año junto con el resto del sector tecnológico en Wall Street.
Sus tibios resultados coinciden con la noticia del problema de seguridad de Facetime, su aplicación de videoconferencia. El fallo permite poder escuchar lo que capta el micrófono del usuario al que se está llamando aunque este no acepte la llamada, un error que corrió como la pólvora por redes sociales y que afecta al Facetime de grupos.
La empresa con sede en Cupertino ha anunciado que arreglará el problema este misma semana, aunque el daño a su imagen ya está hecho.