El aumento en los precios de la comida sigue acelerando. Los grandes fabricantes más para abastecer a nosotros los consumidores, y no pueden simplemente subir los precios para compensar por estos gastos adicionales.
Ya lo han hecho, y las familias en Estados Unidos ya no aguantan más. Por eso han encontrado la forma de “subir los precios sin subirlos”.
¿Cuál es la táctica que están utilizando?
No es muy complicada. Lo que están haciendo es reducir la cantidad que te venden sin cambiar el precio ni el tamaño del empaque (o son cambios muy sutiles en el empaque que casi no se notan). Por ejemplo, vamos a suponer que tu marca favorita de cereal cuesta $5.00 por caja. Esta caja siempre contenía 17 onzas de cereal.
Tú – como casi todos – no te fijas en cuantas onzas contiene la caja, sino solo sabes que compras una caja cada dos semanas. Pero ahora cuando compras la caja, se te acaba antes del próximo viaje al mercado. No es que estés comiendo más, sino que la caja ahora contiene 14 onzas de cereal, no 17. La caja luce casi igual, es del mismo tamaño y tiene el mismo precio, pero el fabricante ha eliminado 3 onzas de cereal de la caja.
¿Vale la pena molestarte por esto? Bueno, quitarle 3 onzas a la caja es igual que subirle el precio más del 20% o pagar $6.07 por las mismas 17 onzas que hace poco costaban $5.00. Esto se ha notado en todo tipo de producto: jugos, salsas, cereales, productos de limpieza y muchos más. Algunas empresas son más agresivas que otras. Lo que hacen es bajarle el precio un poquito para que creas que es un descuento. Es como si en el caso de la caja de cereal le hubiesen bajado el precio a $4.75. Uno cree que hay un ahorro de 25 centavos o el 5%, pero no te olvides que eliminaron 20% del cereal; así que todavía sales perdiendo.
¿Qué puedes hacer?
La clave está en lo que se conoce como el precio por unidad o “unit price” en inglés. Por ley, los mercados tienen que presentar dos precios por cada producto: el precio del ítem y el precio por unidad. Este segundo precio te dice cuánto cuesta una cantidad estándar (libra, pieza, onza, etc.) para que puedas comparar distintas marcas y empaques.
Por ejemplo, una caja de cereal cuesta $5.50 y otra cuesta $4.99. Ambas cajas lucen iguales. Pero al fijarte en el precio por unidad, te das cuenta que la “más cara” en realidad lo es porque contiene más y el precio por unidad sale en sólo 20 centavos por onza mientras que la “más barata” lo es porque contiene muy poco cereal y cuesta 30 centavos por onza. Te vas a sorprender. Verás diferencias del 50% y hasta 100% o más entre dos productos cuando comparas el costo por unidad.
VOCABULARIO FINANCIERO
90%: Incremento en el precio del maíz durante el último año. Esto también impacta en el precio de la carne y la leche porque el maíz se usa para alimentar al ganado.