Pese a los vientos de recuperación que corren, la economía de Estados Unidos volvió a perder 467,000 empleos en el mes de junio.
Con lo que la tasa de desempleo a nivel nacional alcanzó el 9.5 por ciento, el peor nivel desde 1983. El ritmo de pérdida de empleos había disminuido cada mes desde enero, cuando alcanzó una cima de 741,000.
Después de una merma de 322,000 empleos en mayo, la mayoría de los analistas esperaba la eliminación de unos 350,000 puestos de trabajo en junio. Washington y los analistas del sector privado esperan que el índice de desempleo siga aumentando por el resto del año, a medida que se va desvaneciendo el impacto del estímulo económico de 787,000 millones de dólares administrado desde febrero por el Gobierno de Obama.