Este abogado de origen colombiano lleva desde 1994 demandando a caseros y dueños de edificios que maltratan a sus inquilinos, muchos de ellos inmigrantes indocumentados.
Se llama Eric Castelblanco y lleva años metido en litigios contra caseros que básicamente hostigan a sus inquilinos, usurpándoles su derecho a una vivienda digna. Muchos tienen que convivir con ratas y cucarachas en hogares de bajos recursos, con el agravante de no poder protestar por miedo a las consecuencias, a que los echen del apartamento o que llamen a la ‘migra’.
Pero Castelblanco, un inmigrante que llegó a Estados Unidos desde Colombia cuando solo tenía dos años, no se deja intimidar y asegura con convicción que los inmigrantes sí tienen derechos en este país, “aunque sean indocumentados”. Y entiende muy bien las presiones a las que se enfrentan los hispanos. El mismo ya ha recibido amenazas de dueños de edificios que le odian por haberlos demandado en el pasado.
“Ahora tomo muchas más precauciones que cuando empecé”, dice este licenciado en Derecho por la Universidad Loyola Marymount en perfecto castellano. Es algo que ha ido llegando con la mayor cantidad de éxito y prestigio para una firma, Castelblanco Law Offices, que lleva operando desde 1994.
Este abogado de origen colombiano —sus padres son ambos nacidos en Bogotá— empezó con casos de inmigración en su propia firma hasta que la historia de una clienta a la que le estaba tramitando los papeles le hizo dar un giro fundamental en su vida. Marta Alvarado era su clienta por años. “Un día vino a mi oficina llorando, porque el dueño del apartamento estaba poniendo muchos problemas, y ella en ese momentos tenía cáncer. Yo quería ayudarla y así entré en esa rama”.
Desde entonces ha visto cosas increíbles para un país del primer mundo. “La gente vive de una forma pésima, en condiciones muy malas”, por gente “poco honrada” que quiere sacarle el dinero a la comunidad de forma ilegal.
Para Eric Castelblanco es duro que se trate así a gente “muy buena, trabajadores muy duros” que en su opinión no merecen ser vejados de esa forma.
Por eso es una satisfacción cuando se gana un caso como el más importante para el bufete de abogados en 2002, en una compensación superior a los dos millones de dólares que la parte demandada tuvo que pagar a los inquilinos. «Algunos de ellos pudieron comprarse su propia casa”.
“Eso es lo que me gusta de mi trabajo: que ayudo a hacer una diferencia en la vida de los demás, y en un lugar esencial, en sus casas”, explica Castelblanco, un hombre tranquilo, correcto hasta el extremo y abierto a seguir ayudando a la gente de una comunidad que conoce a la perfección, aunque sea desde su despacho en Beverly Hills.
The Law Offices of Eric Castelblanco
8383 Wilshire Blvd. Suite 302
Beverly Hills, CA 90211-2415
Phone: 323 – 951 0180